Mi punto final


Te confiaste y creíste que me encontrarías a mi cuándo estuvieses perdida, que yo siempre estaría ahí, pero te equivocaste.
No puedo intentar continuar junto a una persona con la que quieres ser tu mismo, pero esta ESA persona, que te arrebata los sueños, los pensamientos, los deseos, los gustos; y es cierto que voy a tirarlo todo por la borda, pero es que no me has dado más motivos para no hacerlo y así continuar juntas hacia adelante. Es cierto que ha habido muy buenos momentos, pero hoy, mientras caminaba escuchando música sin saber por qué una lagrima brotó de mis ojos. No hizo falta que me preguntara el motivo de mis llantos, pues ya lo sabía. Una vez más habías conseguido decepcionarme de la peor manera que lo podías hacer. Y entonces empecé a hacer un repaso de nuestra historia, desde el principio, desde aquella vez que éramos simplemente 2 bebés. Y directamente supe, que yo fui la que me equivoqué, yo mal interpreté todo, siempre supe como eras, solo que he creído por un instante que podrías llegar a cambiar, solamente cambiar por mi, por una gran amistad, así durante años he minimizado las cosas malas, he tragado tantas lagrimas por ti. Es más, ya me extrañaba mucho esa buena amistad que tuvimos, amistad de casi 16 años si hace falta decir. Tardabas mucho en hacerme daño, pero esta vez lo hiciste sin saber que no habría marcha atrás, que ya no podré confiar en ti, y que la decepción ahora y siempre será un gran agujero dentro de mi, porque al fin de todo, supe que así es como se pierde, lo que una vez fue, la mejor amistad de mi vida, mi mejor amiga.

Sabes a la perfección que este, es mi punto final.